Bahía Blanca ya cuenta con su propio Club de Emprendedores
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Rodolfo Angeletti
rangeletti@lanueva.com
El sector luce como una invitación al trabajo grupal, salas confortables, con poco y sencillo mobiliario, mucha luz natural y los atributos tecnológicos necesarios para estar conectado con el Mundo, además de una impresora 3D. Está ubicado en el segundo piso de la Torre del Bicentenario, Luis María Drago 45, y lo identifica una placa con la denominación Bahía Emprende.
Se trata del Club de Emprendedores, un espacio dentro del programa Bahía Emprende, que aglutina todas las actividades de la Secretaría municipal de Innovación Tecnológica y Desarrollo Creativo.
“El emprendedor tiene aquí su lugar de trabajo, además de vincularse con otros pares -dice Martín Virdis- quien además aclara que los proyectos no deben tener a Internet como canal excluyente”.
Martín comparte el comando con Albano Laiuppa. Ambos son emprendedores y personal de planta municipal. Junto a ellos se desempeña Diego Montero, director de Emprendedorismo y cuadro político.
Virdis aclara: “No buscamos emprendedores que intenten suplir un empleo con otra actividad alternativa, sino que posean proyectos de base tecnológica con la mira puesta en un mercado que exceda la ciudad”.
“Pensamos en alguien que tenga ambiciones de crear una empresa, que genere trabajo local calificado, y que busque un mercado nacional o mundial”,explicó. La página web del Club es: www.bahiaemprende.gob.ar.
Recursos de excelencia
La iniciativa se apoya en la formación local de recursos humanos capacitados que proporcionan las universidades.
“Quizás lo que les falte es ese espíritu de vocación emprendedora. No emprenden no por falta de capacidad, sino porque nadie les indicó el camino, y porque esa red en la ciudad no está consolidada”, dice Virdis.
Agregó, que revertir esa situación evitaría que muchos egresados universitarios terminen emigrando, haciendo investigación o empleados en una gran empresa.
“Nuestro propósito es que una parte menor de ese capital humano se convierta en emprendedores, que creen una empresa, inviertan en la ciudad y sean capaces de crear fuentes de trabajo calificado, para que otros de sus pares también puedan quedarse acá”, dice Martín.
El ingreso al Club será lanzado el próximo 19 del corriente, en concordancia con el Bahía Emprende Semilla, un fondo de 750 mil pesos incluido en el presupuesto municipal, que se distribuirá como asistencia financiera de hasta 150 mil pesos por proyecto, y que solamente se deberá devolver en caso de “éxito” del mismo.
“Nos tienen que convencer de que hay un gran equipo detrás de un proyecto, y que con él pueden llegar a un gran mercado. Si nos convencen de eso, posiblemente tengan un lugar en el Club”, dice Martín.
Para hacerse acreedor a este desembolso, que se hará en una sola vez, habrá que pasar una exigente etapa de selección.
Una vez abierta la convocatoria, los proyectos que se postulen para el Bahía Emprende Semilla, ingresarán en una etapa de preaceleración, de un mes de duración, donde se definirá el equipo y se repasarán los objetivos.
Los que pasen ese filtro ingresarán a un adiestramiento de 6 meses, donde recibirán el apoyo financiero y contarán con un espacio de trabajo compartido con otros emprendedores, además del seguimiento profesional y la vinculación del grupo a nivel nacional.
Inicialmente, los responsables de hacer el seguimiento de cada proyecto serán Martín Virdis y Albano Laiuppa, pero luego se asignarán tutores tecnológicos y comerciales –empresario o gerente de gran empresa de un rubro asociado-.
La formación,tercera pata del programa, estará a cargo de la Academia Argentina Emprende provincial, y consistirá en dos meses de capacitación intensiva.
El nodo bahiense contará con la colaboración de la UNS, la Universidad Provincial del Sudoeste y la Universidad Tecnológica Nacional.