Suicidio y contención

Redacción de La Nueva.

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Por Cecilia Corradetti / ccorradetti@lanueva.com

Si algunas personas no soportan la vida al punto de querer suicidarse, también se debe a que los dispositivos de soporte de la existencia psíquica fallaron trágicamente. Al menos así lo consideró el psicólogo Hugo Kern, responsable del Centro de Prevención de las Adicciones de Bahía Blanca, luego del informe publicado la semana pasada por “La Nueva.”, que elaboraron especialistas de la UNS, el cual indica que los varones de 15 a 24 años representan la población más vulnerabe.

Dijo Kern que un relevamiento de las investigaciones sobre el suicidio en la adolescencia evidencia la preocupación de los equipos por determinar los “predictores” de la conducta suicida, entre los que se enumeran: haber tenido antes un intento de suicidio; el consumo actual de alcohol o alguna droga; la influencia del medio ambiente; antecedentes familiares (depresión en la madre, consumo de alcohol y otras drogas en padres o hermanos, por ejemplo); clima de tensión, hostilidad o violencia en la familia.

“El suicidio adolescente es un problema muy serio de salud colectiva y es verdad que el grupo poblacional más afectado son los jóvenes de 15 a 24 años”, consideró, para señalar que la problemática planteada constituye un desafío y un compromiso para los equipos de salud.

Agregó que tanto el abuso de drogas como el juego con la muerte son el producto de la búsqueda, en el imaginario, de una situación sin salida, una “locura” producto de la pérdida de referentes simbólicos.

Kern recordó que la adolescencia "es un momento de vulnerabilidad producto de la transformación en todas las esferas de la vida”.