Las inspecciones a los geriátricos se dificultan por la falta de recursos

Redacción de La Nueva.

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Una de las principales problemáticas que atraviesa Región Sanitaria I para poder llevar a cabo una adecuada fiscalización de los geriátricos de nuestra ciudad y la zona es la falta de recursos, ya sean humanos o materiales.

Al menos así quedó demostrado ayer durante la primera reunión de la mesa de trabajo recientemente creada para abordar la situación de los hogares clandestinos y de las muchas dificultades que tienen los establecimientos para avanzar en sus habilitaciones, tal cual lo establece la nueva reglamentación de la ley provincial.

En principio, se dejó en claro que existe un solo inspector destinado a cumplir su tarea en los 15 municipios comprendidos por el organismo sanitario con sede en Moreno 267.

Dicho empleado se desempeña, en la mayoría de los casos, con su vehículo particular, a excepción de tratarse de denuncias de gran relevancia o cuando interviene el 911.

En ese marco, los participantes del encuentro llevado a cabo en la sede de la Corporación del Comercio reclamaron para el próximo la presencia, en el seno del Concejo Deliberante, de dos funcionarios provinciales.

Se trata del director provincial de Fiscalización Sanitaria, Eduardo Bardín, y la subsecretaria del área, Silvia Caballero.

De la reunión de ayer tomaron parte el gerente de la Corporación, Juan Carlos Starovinsky; el referente local de Fiscalización de Región Sanitaria I, doctor Sergio Seri; su par del municipio, Gustavo Altuna; el director de la Cámara de Geriátricos, Gonzalo Rojas y los ediles Matías Italiano (Frente Renovador), Elisa Quartucci y Marisa Pignatelli (IC) y Aloma Sartor (UCR).

“Mayores recursos permitirá un trabajo adecuado, ya que una sola persona se encarga de toda la región”, remarcó Rojas.

Italiano expresó que, más allá de este reclamo, se solicitará a los funcionarios un plazo mayor para que los hogares puedan regularizar su situación y avanzar en una reglamentación “exigente pero necesaria”.

“La autoridad de aplicación es Región Sanitaria y el rol del municipio es colaborar en todo lo necesario. No se pretenden atenuar las exigencias, pero sí extender los tiempos”, manifestó, para opinar que “un solo inspector no alcanza”.

Italiano también explicó que una vez aprobado en el deliberativo el proyecto de resolución para desarrollar el plenario, “la idea es avanzar todo lo posible en mayo”.

“No queremos que se extienda porque el tema lo amerita. Existen solo dos geriátricos autorizados de un total de 247, según se habló hoy (por ayer)”, indicó.

Justicia y PAMI

Más allá de lo expuesto, los integrantes de la mesa coincidieron en la necesidad de que ante cada inspección a un geriátrico también se cite a funcionarios judiciales y de PAMI.

Esto se solicitó teniendo en cuenta que ante numerosos controles, que luego terminan en clausuras, se estaría ante la comisión de delitos como abandono de persona.

“Quedamos también en que PAMI debe formar parte de estas reuniones y de las actuaciones”, dijo Italiano.