Bahía Blanca | Viernes, 19 de abril

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Desde la ex Caracol formalizaron un plan

Solicitaron al municipio que suspenda por algunos meses la prohibición de la tracción a sangre y convoque a una mesa de diálogo, con recolección diferenciada.
Representantes de cinco familias de la ex Villa Caracol presentaron ayer el programa en el Concejo Deliberante.

Por Pamela Subizar / psubizar@lanueva.com

Cartoneros de la ex Villa Caracol dejaron asentada ayer su postura ante el municipio y los vecinos de Bahía Blanca con la presentación de una contrapropuesta: el “Programa de Reciclado Bahiense con Inclusión Social (PRB)”.

La iniciativa fue dada a conocer en una conferencia de prensa en el Concejo Deliberante por cinco representantes de familias del sector, que no llegaron a un acuerdo con la comuna, en respuesta al plan oficial para reconvertir la actividad ante la prohibición de la tracción a sangre anunciada para el viernes.

“Pedimos que se levante la prohibición por tres o cuatro meses hasta fin de año, y que empecemos un período de transición donde pueda haber una mesa de dialogo, con una logística adecuada para no tener que ingresar con los caballos al centro”, dijo Rodrigo García, de la Federación de Recicladores de Argentina.

Los cartoneros presentes aseguraron que el municipio cortó la comunicación, al tiempo que criticaron nuevamente la decisión repentina de prohibir la circulación sin previa consulta a las familias que resultarían afectadas.

“Creo que directamente no tenían nada elaborado cuando tomaron esta decisión, que parece que es que no quieren ver pobres en el centro de Bahía Blanca”, señaló.

El programa presentado apunta a formalizar el trabajo de los recuperadores urbanos incorporándolos a cooperativas que hagan la recolección diferenciada en casas, edificios de menos de 17 pisos y comercios de distintas áreas.

Las cuadrillas, de entre 40 y 60 trabajadores, levantarían los residuos puerta a puerta en cada zona y los llevarían a “centros verdes”, espacios para separar y comercializar los materiales.

El sueldo percibido tendría que tener como base el Salario Mínimo Vital y Móvil, que en la Argentina es de $ 3.600 por mes, a lo que se sumaría una cobertura social, y la indumentaria y materiales de trabajo necesarios.

“Contraponemos esto, que es inclusión social, conserva el trabajo de los compañeros, le da una dignidad que hoy no se la está dando el intendente y es una mejora para la familia, para el barrio y para el medio ambiente”, apuntó García.

El programa apunta a facilitar la lucha contra el trabajo infantil, fomentar el reciclaje y la conciencia ambiental y fue hecho con el apoyo del grupo “El Grito” y se inspira en uno aplicado en la Capital.

Ante la consulta sobre si están dispuestos a trabajar en la Planta Recicladora propuesta por la comuna, Alejandro Toledo, otro cartonero, indicó: “No es mala la idea pero no tenemos garante. Estamos dispuestos a poner de nuestra parte mientras ellos también lo hagan".