Si bien se podaron y talaron varios árboles, aún resta mucho por hacer
A 40 días de que Daiana Herlein, de 15 años, muriera a causa de un pino que le cayó encima en el Parque de Mayo, en el paseo aún se aprecian muchos árboles secos, más allá de que varios fueron talados o podados por la comuna.
De mañana, frente a la Escuela 17, la comuna montó un operativo con camiones y grúas. Se podaron y talaron varios eucaliptos. Por la tarde, varias personas asistieron al lugar a recolectar leña.
“Viene mucha gente a proveerse de madera. Yo aproveché para hacer leña”, dijo Javier, motosierra en mano.
Similar es el panorama en otros sectores del parque. En la zona de parrillas frente a la pista que suele ser utilizada por ciclistas o patinadores se podían percibir ejemplares cortados al ras del suelo y otros en pie, a pesar de estar muertos. En ese mismo lugar, sobre uno de los bancos que decoran el espacio, cayó un árbol en marzo, aunque sin consecuencias.
En el sector de parrillas y juegos, entre el Rosedal y la pista de bicicross, si bien varios ejemplares fueron talados se aprecian muchas especies secas e, incluso, con notorias inclinaciones ocasionadas por el viento.
El secretario de Obras y Servicios Públicos, Rubén Valerio, señaló que las tareas se ejecutan desde hace tiempo en los espacios públicos y que no fueron dispuestas de manera excepcional.
“Así como se hicieron trabajos en el Parque Illia, en el de Independencia y en otras calles y espacios, se trabaja en el Parque de Mayo”, dijo.
Indicó que el espacio es un lugar seguro para quienes asisten y que la poda no tiene nada que ver con la llegada de Semana Santa, cuando cientos de bahienses aprovechan el parque para el esparcimiento.