Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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Es bahiense e hizo periodismo; desde los 13 años escribe lo que le pasa y se viene su primer libro

Se trata de Germán Beder, actual jefe de Prensa de la Confederación Argentina de Básquetbol (CABB).
Fotos: Facebook Germán Beder.

Por Abel Escudero Zadrayec / abel@lanueva.com

   Una tarde marplatense y fría de 2015 el entrenador de la selección de básquetbol juntó a los jugadores que entrenaban para los Panamericanos de Toronto (Canadá) y les dio una orden:

   -Para mañana traigan leído al menos un cuento de Germán -dijo el bahiense Sergio "Oveja" Hernández.

   Y digamos que ese Germán, un tipo esencialmente amigo de cierta exageración humorística oscura, presenció la escena y casi se muere de la vergüenza. Y también de la emoción: del #OrgulloBahiense.

   Porque ese Germán también es de acá. Y es el actual jefe de Prensa de la Confederación Argentina de Básquetbol (CABB) y escribe que da calambre y está por sacar su primer libro: el 1 de junio aparece La vez que casi me muero y otros relatos, editado por Sudamericana.

   -Es el sueño de mi vida, sin dudas. Escribo todo lo que me pasa desde los 13 -le cuenta a lanueva.com.

   Germán se apellida Beder, tiene 32 años y le dicen "Chapa" o "Chapita". Antes de aterrizar en 2014 en la Confederación hacía periodismo en Olé. Y antes en Perfil. Y antes jugó al básquetbol en Pacífico.

("Chapita" con "Manu" Ginóbili, #OrgulloBahiense total. Se hicieron amigos.)

   Germán empezó posteando historias en su cuenta de Facebook, "una red social que nunca valoré".

   Hoy publicó en su muro: "De manera intencional (o no) he ido involucrando en mi ridícula cruzada literaria a una cantidad insólita de gente".

   Es que "Me gusta" va, "Me gusta" viene (?) se creó una respetable comunidad de lectores que festejaban sus textos. Entonces un día "Chapita" se animó y un amigo le hizo el puente con Sudamericana, que tras 2 meses de silencio ofreció editarle el libro.

   "En noviembre de 2015 terminé los 45 cuentos exigidos y los entregué. Me saqué el problema de encima -detalló Germán-. Gracias por haberme bancado en todo el trayecto. A los que me empujaron a creer o que, simplemente, rieron y recomendaron. Es la única manera de trascender. Y perdón por las líneas autorreferenciales. Toda esta mierda se me fue de las manos."

(Entrevistando al bahiense Juan Manuel Torres, que mide 2m10. "Chapita" acredita 1m62.)

   Esto del libro ha pegado emocionalmente de distintas formas. No sólo a Germán.

   "Mi mamá se creyó que yo era Borges y mi papá directamente enloqueció, forzando a todas las personas que entraban a su negocio de metales a leer algo que no querían leer."

   -¿Qué más te genera?

   -Tremendo orgullo. Después... Ojalá le vaya bien, pero el daño ya estará hecho.