Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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En septiembre estaría lista la residencia para familiares

Comenzaron los trabajos para recuperar un pabellón en desuso del centro médico más concurrido de nuestra región, gracias a la intervención de la Fundación Ronald Mc Donald.
El inicio, simbólico, de las tareas. Esta semana empezaron a trabajar los albañiles en un espacio que tendrá ocho habitaciones y todas las comodidades.

Por Cecilia Corradetti / ccorradetti@lanueva.com

Comenzó a gestarse ayer a pocos metros del Hospital Penna uno de los proyectos más ambiciosos de los últimos años en función de la inversión (8,5 millones de pesos) y la misión solidaria: una residencia gratuita para familiares de niños bajo tratamientos prolongados y embarazadas de alto riesgo.

Fue durante un acto desarrollado en el sanatorio provincial con la presencia de autoridades de la Fundación La Casa de Ronald Mc Donald.

La iniciativa comenzó a plasmarse el miércoles en el viejo pabellón 11, sobre calle Láinez, a unos 200 metros del hospital, y se inauguraría en septiembre. Ocho albañiles iniciaron la recuperación del edificio donde décadas atrás funcionaban consultorios externos y últimamente estaba abandonado.

Según el plano exhibido ayer durante una recorrida por el lugar, el espacio de 350 metros cuadrados contará con ocho habitaciones, cocina, living- comedor, lavadero, sala de juegos, dos baños y una zona parquizada.

"Estimamos que en septiembre vamos a inaugurar; para eso hay que trabajar duro”, dijo Alejandro Yapur, de la Fundación.

El lugar tendrá capacidad para unas 20 personas –-alrededor de 200 al año-- y los sectores estarán divididos en dos.

“Uno será para ambulatorios, es decir, aquellos que llegan para someterse a estudios, y otro para quienes deban permanecer un tiempo. Es muy importante que el familiar se encuentre a dos cuadras y en el mismo complejo”, apuntó.

“Nuestro concepto es `un hogar lejos del hogar` y en ese sentido estamos aportando nuestro granito de arena a los numerosos padres que atraviesan momentos difíciles”, subrayó.

Aclaró que funcionará de manera similar a otras cuatro casas similares en el país, es decir, para pacientes que presentan múltiples necesidades: realizar estudios de laboratorio y por imágenes, tratamientos ambulatorios prolongados (como transfusiones y sesiones de quimioterapia) e internaciones en hospital de día, además de una red de contención socio-emocional.

El director del Penna, doctor César Comezaña, recordó que la posibilidad surgió hace más de un año, cuando se iniciaron los primeros encuentros con la Fundación.

“Finalmente, en diciembre, se firmó el convenio entre las partes y aquí estamos”, rememoró.