Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Hace 150 años los galeses llegaban a la Patagonia

El Programa Compartiendo Caminos tiene muchos objetivos que se irán cumpliendo durante los tiempos que vienen, y que servirán para recordar el punto de partida de este proceso inmigratorio. En realidad, aún quedan muchas actividades por delante.

La colonización galesa no se parece a ninguna otra colonización. Los 153 colonos que llegaron en 1865 a las costas del Golfo Nuevo, en Chubut, debieron aprender a vivir en una tierra jamás imaginada; pero la paz les marcó el rumbo y así surgió el abrazo de dos mundos diferentes.

Los tehuelches, dueños absolutos de esas tierras lejanas, les enseñaron a cazar y a trabajar el cuero. Ambos pueblos conformaron la primera gran relación pacífica y simbiótica entre europeos y nativos.

Los galeses que llegaron el 28 de julio de 1865, hace 150 años, buscaban un lugar que los albergara y les permitiera conservar su idioma, costumbres, tradiciones y religión.

El reconvertido velero Mimosa llegó a Punta Cuevas y ellos se establecieron cerca de Rawson, la actual capital provincial. Sobrevivieron a muchas penurias, al clima riguroso y a la nostalgia. Pero nunca perdieron la fe.

Con el tiempo migraron hacia el interior de la provincia, construyeron sus casas con los materiales que tenían a mano y nunca olvidaron levantar pequeñas capillas. Sitios santos que además de los oficios religiosos se usaban para los encuentros sociales y como escuelas.

Perdieron cosechas por las repentinas crecidas del río Chubut, pero en lugar de detenerse abrieron una red de canales a lo largo del valle. Y todo cambió cuando ellos se amigaron con el entorno, y hasta ganaron con sus cosechas competencias mundiales.

Pero era necesario sacar la producción, y fue entonces que uno de ellos, Lewis Jones, se animó a soñar con una vía férrea entre el valle y el entonces pueblo de Madryn. Así surgió Trelew, en galés “pueblo de Luis”, en homenaje al impulsor de la idea, ya que fue el lugar elegido como punta de rieles en el valle.

Chubut siempre tendrá marcada en su tierra la impronta de los galeses, un pueblo que se resiste a perder su lengua. La enseñanza bilingüe de los idiomas castellano-galés es algo inédito en el mundo.

También han conservado el Eisteddfod, un tradicional festival literario- musical, de origen milenario, que se realiza en la Patagonia argentina en ambos idiomas.

El Programa Compartiendo Caminos, en galés Rhannu Llwybrau, tiene muchos objetivos para este 2015, el año del sesquicentenario del arribo de los galeses al país.

Algunos ya cumplidos, como la firma del acta que en febrero último hermanó a dos ciudades: Trelew y Caernarfon, la ciudad natal de Jones, y la publicación, en mayo, del Libro de Trelew, con fotos de hitos históricos.

También se trabaja en la instalación de carteles en lugares emblemáticos de Trelew, en el lanzamiento de la página web de Compartiendo Caminos, en castellano, inglés y galés, y de folletos turísticos en galés.

Además, se prevé un homenaje a Aaron y Rachel Jenkins, principales impulsores del riego por canales, que permitió a los pioneros afianzarse en la zona, y para julio la inauguración en el valle del Monumento al Riego.

En calendario anual de actividades incluye la Muestra Fotográfica en el Pueblo de Luis, un Festival Cinematográfico, la Fiesta del Valle y la Torta Negra, una Feria Gastronómica con las chefs Narda Lepes y Dolly Irigoyen, y el crítico culinario Pietro Sorba.

También habrá clases de galés, la puesta en el Teatro Verdi del musical “Mimosa, un Festival de Tango, una Noche de Milongas, un concierto de la Orquesta Sans Souci de Buenos Aires y un Encuentro de Guitarras. Las bodegas y cerveceras locales fueron invitadas a crear una etiqueta conmemorativa para sus bebidas, que se venderán en ferias y comercios y servirán de souvenirs de este sesquicentenario.