Bahía Blanca | Miércoles, 24 de abril

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Aníbal dijo que la reunión con su sucesor fue “discreta” y no “secreta”

"Se habló de todos los temas que se tenían que hablar en la altura que se tenían que hablar y eso es muy positivo", destacó.
Fotos: DyN

   El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, afirmó esta mañana que la reunión que mantuvo con el sucesor en su cargo, Marcos Peña, fue "discreta" y no "secreta" y destacó que "se habló de todos los temas que se tenían que hablar".

   "Se habló de todos los temas que se tenían que hablar en la altura que se tenían que hablar y eso es muy positivo", destacó Fernández.

   En declaraciones formuladas en la Casa de Gobierno, el funcionario agregó: "Con Peña quedamos en hablarnos y, si es necesario, volver a juntarnos las veces que así fuera".

   Fernández recordó que además del encuentro que mantuvo el viernes pasado con el designado jefe de Gabinete se registraron encuentros entre la ministra de Seguridad, María Cecilia Rodríguez, y su sucesora, Patricia Bullrich, así como encuentros entre el ministro de Economía, Axel Kicillof, y funcionarios designados del área económica de la gestión de Macri.

   Señaló que la intención es "seguir por el mismo camino aportando lo que se pueda" sobre "cosas que se deben estar pensando y preparando para la nueva gestión de gobierno".

   Luego de algunos cortocircuitos, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, finalmente recibió en la Casa Rosada el viernes pasado a su sucesor, Marcos Peña, para iniciar el trabajo de transición y ambos coincidieron que fue un encuentro "cordial y positivo".

   "Por expresas instrucciones de la presidenta Cristina Kirchner recibí hoy, viernes feriado, a Marcos Peña. Buena charla y temas variados. Quedamos en volver a vernos para seguir conversando", se limitó a publicar Fernández en su cuenta en la red social Twitter.

   El encuentro, del que no hubo fotografías, se produjo luego de varias idas y vueltas en torno a la modalidad del proceso de transición, ya que Fernández pretendía que se manejara de manera más reservada, mientras que Peña hizo énfasis en el carácter público que debían tener estos encuentros y denunció incluso un intento de "transición clandestina u oculta". (NA)