Estiman en 2 % del total las pérdidas en la cosecha de trigo por las lluvias

Redacción de La Nueva.

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   Tras una semana con buenas condiciones climáticas, los excesos hídricos registrados desde mediados de mes comienzan a escurrir hacia zonas bajas y ríos, permitiendo una lenta recuperación de varios cuadros de trigo lo que reduciría las pérdidas al 2% del total.

   Según el último informe del Panorama Agrícola Semanal (PAS) de la Bolsa de Cereales porteña, las zonas que aún permanecen muy comprometidas son el Centro de Buenos Aires y la Cuenca del Salado, en donde la superficie implantada con trigo es baja.

   Mientras que sobre la región Núcleo Sur, varios cuadros se recuperan satisfactoriamente y en términos generales las pérdidas se reducen a sectores bajos de lotes.

   Con este escenario "la pérdida total de área podría ubicarse próxima al 2 % de las 3,7 millones de hectáreas estimadas a nivel nacional para la campaña en curso", indicaron los especialistas.

   "En paralelo se prevé que el lavado de nitrógeno, junto a la baja tecnología aplicada en muchas de las regiones afectadas, pueda impactar sobre la formación de rendimientos", acotaron.

   Sobre el norte de la región agrícola, la mayor parte del área implantada en las zonas NOA y NEA transita etapas de encañazón, bajo condiciones hídricas adecuadas.

   A pesar de relevarse presencia de pulgón en varios lotes, el estado sanitario general del cultivo aún es bueno y hacia el Centro-Norte de Santa Fe la mayor parte del cereal también transita etapas de encañazón.

   Se relevan excesos hídricos en diferentes sectores del margen este y es probable que se registren pérdidas parciales en ambientes bajos.

   En Córdoba, la región Centro-Norte mantiene gran parte del área entre etapas de macollaje y encañazón, "relevándose falta de humedad en varios sectores de la región".

   "Pese a esto último, el estado del cultivo varía de bueno a muy bueno en la gran mayoría de los cuadros, registrándose problemas aislados de roya", señalaron.

   Hacia el sector Sur de la provincia también se relevó falta de humedad en diferentes localidades, por tal motivo es necesario reponer humedad sobre todo en lotes que inician etapas críticas de encañazón.

   En las regiones Núcleo Norte y Núcleo Sur prevalece la condición de exceso hídrico, no obstante el agua comienza a escurrir "permitiendo que varios lotes se recuperen rápidamente", manifestaron.

   Se prevén pérdidas de área en sectores bajos que aún mantienen agua en superficie y "también lixiviación de nutrientes, que podría afectar el potencial de rinde a cosecha, en cuadros que se recuperaron luego de los excesos hídricos".

   "También es importante tener en cuenta que gran parte del área se está realizando con bajos niveles de tecnología aplicada", añadió el PAS.

   En la región bonaerense, las zonas Centro y Cuenca del Salado fueron las más comprometidas por inundaciones: La escasa pendiente característica de los campos ubicados sobre la cuenca del Río Salado, junto con el elevado nivel de las napas freáticas, dilatan la recuperación del área afectada.

   "A la fecha todavía hay sectores intransitables y muchos productores aún no pudieron acceder a los campos para realizar una evaluación precisa del impacto de las inundaciones", sostuvo el reporte.

   No obstante la mayor parte del área comprometida son ambientes bajos, en donde la agricultura de cultivos extensivos presenta escasa participación, dado que en su mayoría la misma se ubica en ambientes de loma; esta característica de ambas regiones permite atenuar las pérdidas previstas.

   Por último, los núcleos trigueros ubicados sobre el Sudeste y Sudoeste de Buenos Aires y Sur de La Pampa, mantienen una oferta hídrica adecuada a óptima. (NA)