Tras la destitución de Rousseff, asumió Temer como presidente de Brasil
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El Senado destituyó hoy a Dilma Rousseff como presidenta de Brasil por 61 votos contra 20, en el final de un largo proceso de juicio político, y Michel Temer asumió como mandatario hasta el 2018.
Temer dijo que "arreglar la economía de Brasil no será fácil" y reveló que su prioridad es poner un techo a los gastos este año, atraer inversión extranjera, reducir el desempleo y comenzar una reforma del sistema de pensiones.
En tanto, en su primera reunión de gabinete después de ser juramentado por el Congreso, afirmó que no tolerará divisiones dentro de su coalición.
La decisión
La destitución supone el fin de un trámite que comenzó en diciembre pasado en el Parlamento y fue supervisado en cada uno de sus pasos por la Corte Suprema, como garante constitucional de un juicio que Rousseff, condenada por graves irregularidades fiscales, califica de "golpe".
El pleno del Senado empezó a cantar el himno nacional en el momento en que se anunció la decisión, pero fue interrumpido por una nueva votación, en la que se decidirá sobre una pena adicional, que sería la suspensión de sus derechos políticos durante ocho años.
Rousseff fue encontrada culpable de alterar los presupuestos mediante tres decretos no autorizados por el Parlamento y de contratar créditos a favor del gobierno con la banca pública, lo cual negó durante todo el proceso, que califica de "golpe".
Críticas
De "ruptura constitucional" y "golpe" hablaron hoy los senadores que hicieron la última defensa de la mandataria, que llegaron a tildar de "canallas" a aquellos senadores que apoyaban la destitución.
"Esto es una farsa, farsa, farsa. Es un proceso basado sólo en pretextos que será juzgado por la historia", afirmó el senador del Partido de los Trabajadores (PT), Lindbergh Farías.
Replicó el senador Ronaldo Caiado, del derechista partido Demócratas (DEM), quien afirmó que "canallas son los que se enriquecieron ilícitamente, canallas son aquellos que quebraron Petrobras, canallas son aquellos que dejan a Brasil en una situación crítica".
La destitución de Rousseff confirma en el poder a Michel Temer, quien completará el mandato que vence el 1 de enero de 2019, para el que Rousseff había sido reelegida en octubre de 2014. (EFE y Télam)