Defensa Civil mejora su servicio

Redacción de La Nueva.

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Si bien es una de las áreas del municipio que menos prensa parecen tener, y que por lo general no caen en cuestionamientos o polémicas, Defensa Civil conforma una de las prestaciones más trascendentes que presta actualmente el municipio.

Día a día, los alcances de su accionar parecen incrementarse.

Su participación incluye el apoyo en un accidente vial, la colaboración con los bomberos en caso de un incendio, la caída de la rama de un árbol, el rescate de un animal en un arroyo, el retiro de algún elemento que complique el tránsito vehicular y un listado de intervenciones para una variedad de situaciones que superaría el espacio de esta columna.

En las últimas horas acaba de sumar a su flota dos nuevos vehículos tipo combi, los cuales fueron equipados de inmediato con un conjunto de elementos adquiridos un tiempo antes -por caso camillas, cuellos ortopédicos, desfibriladores-, con la idea de mejorar la capacidad de respuesta ante situaciones complejas que puedan involucrar, en especial, a un número muy elevado de víctimas.

El responsable de esa cartera, Federico Montero, explicó a este diario que Bahía Blanca es una ciudad que, por su propio movimiento y su intensa actividad, tiene situaciones diarias que pueden generar ese tipo de eventos y necesita, ante esas situaciones particulares, disponer de una capacidad de respuesta acorde con las exigencias y con la celeridad adecuada para poder atender a los heridos.

Por eso también el municipio sumó además un grupo electrógeno y una columna provista de artefactos de iluminación, de manera que si un suceso se verifica en horario en que se carece de luz natural, igual se disponga de las condiciones adecuadas para realizar de buena manera ese trabajo. Como se ve ninguna precaución es excesiva cuando de velar por la seguridad de la población se trata. De hecho, toda nueva medida exige refuerzos y mejoras posteriores.

Del mismo modo que los tiempos han exigido a los gobiernos comunales asumir responsabilidades que hace años eran impensadas -por caso, en materia de seguridad-, en este caso se ha tomado conciencia de que, más allá de funcionar organismos en teoría preparados para dar respuestas a situaciones de riesgo o emergencia, el propio municipio tiene como objetivo ser parte activa en esas circunstancias, a partir de un equipamiento adecuado, así como también de una calificada capacitación del personal que se ocupa de esas tareas.