Bahía Blanca | Miércoles, 17 de abril

Bahía Blanca | Miércoles, 17 de abril

Bahía Blanca | Miércoles, 17 de abril

Agua que sobra y que falta

El embalse del complejo hídrico de Paso de las Piedras está al máximo de su capacidad, desborda, no puede recibir más agua y cada lluvia, de alguna manera, no hace sino complicar las cosas.

Atrás ha quedado una situación que apenas dos años atrás puso a la ciudad en emergencia e hizo pensar, incluso, que se estaba en las puertas de un duro enfrentamiento entre la industria y la población, referida a la prioridad a la hora de restringir los consumos para cuidar el servicio.

La cota del lago ya superó los 165 metros sobre el nivel del mar, recuperando casi 12 metros en relación a hace cinco años, y llevando a la capacidad de almacenamiento en el tope de sus posibilidades.

Claro que, lejos de alejar fantasmas en cuanto al recurso, no hace más que dejar en claro que, aun en estas favorables condiciones, la capacidad de respuesta es insuficiente.

En una nota publicada por este diario el pasado lunes 30 de marzo, se menciona de manera detallada cómo la falta de agua complica el desarrollo industrial de la ciudad, al punto que ni siquiera una obra tan trascendente como será el acueducto del Río Colorado –por ahora incluido en los emprendimientos fallidos- podría resultar suficiente para permitir la llegada de nuevas empresas de relevancia.

Por eso se hace necesario seguir impulsando todas las alternativas posibles a la hora de contar con recursos de los denominados alternativos o suplementarios. Por un lado, las industrias debieran renovar su compromiso para ser parte de la construcción de la promocionada planta de reciclado de líquidos cloacales, lo que no solo permitiría obtener el agua necesaria para todo el sector petroquímico, sino que además reduciría de manera notable la contaminación que sufre la ría.

Tampoco se puede renunciar, a pesar de ser un reclamo centenario, a un posible embalse del arroyo Napostá, que también, de acuerdo con algunos cálculos, permitiría prescindir del 20% del agua que hoy se toma del embalse de Paso de las Piedras.

Lo cierto es que estas obras deben abandonar su condición de emprendimientos utópicos e ir alcanzando grados ciertos de realidad, sobre todo a partir del compromiso empresarial, teniendo en cuenta que la ciudad, el Estado provincial y nacional, no tienen los recursos necesarios para impulsar esas intervenciones, aunque seguramente son estas empresas las que debieran fortalecer sus aportes económicos para concretar estas obras, sin las cuales su operatividad entrará en crisis en los próximos años.