Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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La Universidad busca mejorar

Con la asunción de las nuevas autoridades de la Universidad Nacional del Sur, el ingeniero agrónomo Ricardo Sabbatini (rector) y la licenciada Claudia Legnini (vicerrectora) anticiparon algunas inquietudes que vienen siendo, desde hace tiempo, pedidos por parte de los estudiantes y una necesidad a la hora de tener una casa de estudios abierta e inclusiva.

Continuadores de la gestión saliente, los funcionarios anticiparon su voluntad de cumplir una gestión que sea ejemplo de conducción participativa y administración austera.

Para ello buscarán desarrollar el Plan Estratégico que fue aprobado dos años atrás, a favor de una universidad que se distinga por la calidad de la enseñanza, la trascendencia de su investigación y su capacidad para satisfacer los requerimientos de la región y el país.

se Anticipó, en este sentido, que se buscará aumentar la oferta educativa, “en respuesta a la demanda social y a las necesidades estratégicas de nuestra región”, a partir de modalidades “que permitan trabajar y estudiar” y de “una apuesta por la educación a distancia”.

se dijo, además, que “la producción científica, tecnológica y humanística”, de la casa de altos estudios deberá aumentar “significativamente” la pertinencia social y regional, buscando un necesario equilibrio entre cada grupo de investigación y las demandas de la sociedad y fortaleciendo la vinculación con el medio.

Por último, en una cuestión que nunca es menor para una entidad sostenida por el Estado nacional, se trabajará en supervisar las condiciones ingreso y permanencia de los estudiantes, iniciando a tal efecto “acciones decisivas”, destinadas a favorecer la incorporación de todos los ingresantes en las mejores condiciones posibles, y a desarrollar acciones tendientes a la retención de los mismos a través del seguimiento y apoyo continuo.

No deja de ser importante sumar alternativas de estudio a partir de las nuevas herramientas comunicacionales, ajustar condiciones que eviten los altos porcentajes de deserción, poner ciertos límites a los estudiantes eternos y establecer la posibilidad de que quienes trabajan puedan acceder a las carreras.

Finalmente, resulta indispensable fortalecer perceptiblemente el acercamiento entre el mundo académico y el de una necesidad que siempre está necesitada de respuestas.