Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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Las tierras del Pro.Cre.Ar.

Luego de un año y medio de realizado el primer sorteo de préstamos para que unos 1.600 bahienses puedan adquirir un terreno donde erigir su vivienda a partir de préstamos otorgados por ANSES, el Estado Nacional pudo avanzar con una de las pautas de esa operatoria, cual era la de posibilitar a los beneficiarios acceder a tierras estatales.

Fue precisamente esa limitación la que derivó en una limitación para avanzar con el programa, ya que, como ocurrió en todas las ciudades del país, la falta de tierras disponibles en el mercado inmobiliario –por un lado- y el alza en los valores como consecuencia de la demanda conformaron una barrera infranqueable.

El municipio, que se sumó al reclamo por las tierras fiscales ociosas de la ciudad, desarrolló –dentro de sus posibilidades- un relevamiento de terrenos de particulares que pudieran sumarse a un banco de tierras con las condiciones legales requeridas por el Pro.Cre.Ar., la factibilidad de servicios y un valor adecuado, el cual fue puesto a disposición del ANSES para su análisis.

Pero el nudo a desatar seguía en manos del Estado nacional, que tenía que disponer de tierra en manos de organismos propios, por caso Vialidad Nacional, Ejército y ferrocarril. Sin embargo, a la hora de la verdad, cada una de esas posibilidades presentaba trabas poco menos que insalvables, sea por falta de papeles, por estar en procesos judiciales o incluso por requerir la intervención del Congreso Nacional para su desafectación.

Así el panorama, los adjudicatarios conformaron una comisión, viajaron a Buenos Aires y hasta mantienen una mecánica de manifestación periódica frente al palacio municipal, reclamando una respuesta y, a esta altura, una actualización del dinero asignado en un país donde la inflación hace de las suyas.

De allí, entonces, la importancia del reciente anuncio de la ANSES de haber conseguido 15 hectáreas propiedad del Ejército sobre el camino de La Carrindanga, lo que permitirá sumar unos 500 lotes, aun cuando los mismos todavía deberán ser evaluados, pues hay varias condiciones que deben cumplir.

No debe ignorarse, en ese punto, que hoy es casi inexistente la oferta de créditos hipotecarios con intereses ventajosos y cuotas accesibles, y que en ese sentido el Pro.Cre.Ar es, por lejos, la única propuesta posible de los últimos tiempos.

Por eso se hace imprescindible no estafar la confianza de la gente y demostrar seriedad para cerrar el programa.