Bahía Blanca | Miércoles, 24 de abril

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Siempre es conveniente llevar a los chicos al pediatra

Con distinta periodicidad según las edades, se destaca la importancia de la consulta para que se los pese y mida para ir haciendo un seguimiento de su desarrollo.
Siempre es conveniente llevar a los chicos al pediatra. Salud. La Nueva. Bahía Blanca

Los especialistas rescatan la importancia de llevar a los niños a la consulta con el pediatra, incluso si el chico no presenta ninguna molestia.

La razón detrás de esto es que se busca saber si el niño está creciendo correctamente; si su desarrollo está dentro de los parámetros correspondientes.

Particularmente, las mediciones de talla, peso y contorno de la cabeza (perímetro cefálico) deberían realizarse en cada consulta para detectar a tiempo –si fuera el caso- un trastorno de crecimiento, ya que el diagnóstico temprano mejor notablemente el pronóstico de la condición.

Consultada sobre este tema, la doctora Ana Keselman, médica pediatra endocrinóloga, miembro del Servicio de Endocrinología del Hospital de Niños ‘Ricardo Gutiérrez’, explicó que “el crecimiento es el indicador por excelencia de la salud. Cualquier situación que afecte la salud, puede alterar la talla durante la infancia, y si esto no es detectado a tiempo, puede verse comprometida la talla final.

Problemas de nutrición, enfermedades generales como respiratorias, renales, gastrointestinales, cardíacas o metabólicas, y anomalías genéticas o cromosómicas, así como alteraciones hormonales, pueden causar trastornos en el crecimiento”.

Con frecuencia, la situación que se percibe es que los padres únicamente lleven a sus hijos al pediatra ante emergencias, como un dolor agudo o algún otro síntoma. En estas situaciones, lo más común es que el médico disponga de una cantidad limitada de tiempo y únicamente se ocupe de esta afección, sin alcanzar a realizar las mediciones de crecimiento.

Keselman enfatizó que “es fundamental que el pediatra controle si está creciendo adecuadamente para la edad y la etapa del desarrollo en que se encuentra, porque muchas veces el único signo de una enfermedad es la detención del crecimiento”.

Indicadores

Algunos indicadores pueden dar señales de que el crecimiento no es normal.

Entre ellos, se destacan las situaciones en las que el niño no cambia de número de zapato o de ruedo de los pantalones; o ya en la etapa escolar, la comparación con sus compañeros puede despertar una sospecha.

En estos casos, se recomienda programar una visita al pediatra para realizar el examen clínico y de laboratorio pertinente y evaluar la derivación al endocrinólogo pediatra en la que se lo consulte específicamente por el crecimiento.

Es crucial actuar de manera temprana para, en caso de que se esté frente a un trastorno del crecimiento, iniciar un tratamiento.

Existen tres factores que pueden afectar el crecimiento y son: la alimentación, la salud general y la herencia genética. Sobre esto, “si bien la mayoría de las veces las causas de la baja talla son por ser niños nacidos de familias donde los padres presentan baja estatura (baja talla familiar), o porque maduran más lentamente, en algunas situaciones nos encontramos ante la sospecha de que alguno de los padres le haya transmitido alguna patología que impacte en su crecimiento.

Por eso, al estudiar a un niño con baja talla, es de utilidad medir a sus padres y realizar una evaluación de sus antecedentes”. Los profesionales no deben centrarse en si el niño ha crecido mucho o poco sino, sobre todo, si ha crecido lo adecuado en determinado período de tiempo para los parámetros normales, teniendo en cuenta las variables de género, talla, peso y población que integra.

En nuestro país, contamos con datos representativos de la talla de niños y niñas según edad, población y género, además de los datos de la Organización Mundial de la Salud. Estos sirven de referencia sobre lo que es un crecimiento normal y es importante que el pediatra contraste los patrones de crecimiento del niño con las curvas de crecimiento de las guías y, si identifica desvíos, lleve adelante estudios para descartar patologías de base.