Prematuro juego electoral frente a un clima enrarecido
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Primer capítulo de una novela con final incierto. La convocatoria gubernamental a los sindicalistas docentes despierta especial expectativa por la discusión salarial del sector.
Se sabe, la Provincia buscará que cualquier aumento no supere el techo del 20 por ciento, pero el arco gremial de guardapolvos ya salió a rechazar esa posibilidad y reitera la amenaza de no reiniciar las clases en marzo venidero.
“No podemos discutir una pauta salarial para el 2017 sin tener en cuenta la pérdida del poder adquisitivo que han sufrido los ingresos docentes en los últimos 6 meses. A esto se le suma el nuevo incremento en la tarifa eléctrica”, advierten.
En el juego de las presiones, la Gobernación buscará una vuelta a clases “normal” pero advirtió que no puede ofrecer un incremento que después no pueda pagar. Incluso, insiste con la posibilidad de utilizar cláusulas “gatillo” por inflación.
Desde la gobernación de María Eugenia Vidal vienen sugiriéndole también a intendentes “propios” no dar aumentos por encima del 18% en las negociaciones con los empleados municipales.
La recomendación viene acompañada de una advertencia: la Provincia no asistirá financieramente a jefes comunales que cierren paritarias superiores a dicho porcentaje de suba salarial y luego no puedan afrontar los costos financieros de esos acuerdos.
El calendario de febrero llegó con la antipática fuerte carga de aumentos, básicamente por el tarifazo eléctrico. En el oficialismo de Cambiemos preocupa el impacto real (el bolsillo de los usuarios) que tendrán este tipo de medidas económicas en el proceso electoral. Además, la estructural crisis de inseguridad aparece como otro eje de las mayores preocupaciones ciudadanas. Es imposible seguir “combatiendo” el delito con medidas casi improvisadas, dispuestas al azar.
No es el fin del mundo, pero...
Políticamente, Vidal abrió el paraguas. No es “el fin del mundo” perder las elecciones legislativas pero admitió que de ganarlas sentiría más respaldo popular.
Aquellos que certifican encuestas de opinión pública que encargan regularmente en La Plata, advierten que, como nunca antes, la mandamás bonaerense sintió el impacto de la andanada cruzada de cuestionamientos por no volver de sus vacaciones en México para atender personalmente la emergencia por las inundaciones en varios municipios de la PBA.
El “blindaje mediático” no funcionó y el descontento alteró los índices de “imagen positiva” de la Gobernadora.
Dentro de la Gobernación de calle 6 imaginan un intensivo “corte de cintas” con inauguraciones de obra pública durante la etapa pre electoral. Ya se invitó a los 135 intendentes a “sacar turno” para presentar con los proyectos de obra pública que serán financiados por el Fondo de Infraestructura Municipal (FIM) Las carpetas se recibirán a partir de hoy y hasta el 16 del corriente mes en el ministerio de Infraestructura.
El FIM 2017 consta de 8.500 millones de pesos y se estima que se presentarán más de 700 proyectos de obras distritales.
“Nunca antes la Provincia le dio a los municipios esta cantidad de fondos, por eso es importante que los intendentes ejecuten las obras”, los emplazó Luis Giménez, subsecretario de Desarrollo de Infraestructura Local.
Después de la presentación, se hará un seguimiento de los proyectos y en caso de cumplir todos los requisitos, durante el primer trimestre, la Provincia realizará el primer desembolso correspondiente al anticipo para comenzar con la ejecución de las obras.
Por esta y otras cuestiones como, los tarifazos nacionales, la estrategia electoral del oficialismo gubernamental fue en aumento al ritmo de la sensación térmica. No descartan una probable polarización electoral entre Cambiemos y el peronismo del Frente para la Victoria y que, sobre ese escenario electoral, el esquema renovador massista quede atrapado en la extensa “avenida del medio”.
Cristina, ¿candidata?
Al ritmo de la ola de calor, referentes del peronismo opositor pretenden elevar las acciones electorales de Cristina de Kirchner para que sea candidata a senadora por la Provincia en las legislativas 2017.
La movida no es unánime aun cuando la ex presidenta se mantiene activa en las redes sociales con posiciones hipercríticas al gobierno de Mauricio Macri. Mientras tanto, un grupo de intendentes y legisladores bonaerenses siguen trabajando en la opción que promete Florencio Randazzo, interpretando que la reconstrucción del PJ no pasa por el formato ultra K.
Cambiemos parece dispuesto a adecuarse a las circunstancias. Sigue vigente el plan original de impulsar al terreno electoral al neurocientífico Facundo Manes, el alcalde de Vicente López, Jorge Macri, la funcionaria nacional Gladys González (esposa del presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Manuel Mosca) reproducción cinematográfica similar a escenas del peronismo conyugal.
También se anotan un par de funcionarios de Vidal: el ministro de Seguridad, Cristian Ritondo y el joven subsecretario de Asuntos Municipales, Alex Campbell.
Estos movimientos aceleran los tiempos del tigrense Sergio Massa, quien junto a la “renovadora” Margarita Stolbizer siguen adelante con la decisión de ir juntos en las próximas elecciones bonaerenses, en una suerte de eje del péndulo que pronostican el FpV y la mesa de campaña territorial de Cambiemos bonaerense, bajo la conducción política del jefe de Gabinete, Federico Salvai.