Recalculando el impacto social
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La gobernadora María Eugenia Vidal sabe que empuja una Provincia estancada no sólo en infraestructura, sino también en inclusión social.
Voluntaria pero no inocente en términos políticos, Vidal decidió poner su elevado nivel de imagen positiva “a disposición” del tractor amarillo de la Rosada, después de la sonora protesta callejera contra “el tarifazo” en las facturas de gas, luz o agua potable.
Consciente de esa dificultad y el costo político, el jefe de Gabinete macrista, Marcos Peña, hizo pie en distritos del Conurbano bonaerense para progresar en una red de contención social que impulsa la Gobernadora, y hasta capitaneó un operativo de "timbreo" de Cambiemos para conocer inquietudes vecinales.
“El gobierno nacional se equivocó y el tarifazo generó la primer grieta de la gestión de Mauricio Macri, entre los que pueden pagar y los que no”, castigó el cinturón negro de taekwondo del massismo dentro de la Legislatura; el diputado del Frente Renovador, Ramiro Gutiérrez.
“María Eugenia nos pide un ojo en el escritorio y el otro en el territorio sin distinción política”, amplía el secretario general de la Gobernación, Fabián Perechodnik.
En ese contexto, la Provincia viene de colaborar con aquellos intendentes que necesitaron asistencia para abonar aguinaldos.
Mientras la agenda legislativa y judicial entró en receso por dos semanas de invierno, en la Gobernación ensayan técnicas para controlar el pulso. Todo parece indicar que durante este período puede abrirse un nuevo frente de conflicto salarial de la mano del descontrolado proceso inflacionario y el cuadro tarifario en los servicios públicos.
La pulseada paritaria salarial entre la Provincia y los sindicalistas estatales promete instalarse como la “película de suspenso” de la cartelera invernal. La negociación tiene final abierto.
También desde el sector docente, la gremialista de la FEB, Mirta Petrocini, ya condicionó la vuelta de los alumnos a las aulas tras el receso invernal si no surge un gesto claro de la Gobernación de calle 6 de iniciar una recomposición salarial para el sector.
La Policía, otro frente
Si bien la reciente “foto” de intendentes y legisladores PJ y del Frente Renovador pidiendo traspasar la Policía de Prevención Local a los municipios junto al financiamiento provincial para sueldos y equipamiento de las fuerzas de seguridad en los distritos, no estableció una tendencia fue otro factor que aceleró el pulso gubernamental.
La pirueta conjunta de los peronismos provocó cierto fastidio dentro del Ejecutivo.
Ni lerda ni perezosa, Vidal se encargó personalmente en reflejar que "el ministerio de Seguridad paga el sueldo y los uniformes de cada uno de los policías locales”.
En líneas generales, la combinación parlamentaria de algún modo lesiona el pacto de gobernabilidad de Vidal con el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, alcaldes y legisladores peronistas y massistas arrancaron criticando la política del área de seguridad de Cristian Ritondo, en medio de una fuerte arremetida contra el legajo del actual jefe policial, Pablo Bressi, a partir de las graves denuncias formuladas por la diputada “Lilita” Carrió.
En tanto, operadores de los peronismos barajan distintos dibujos de armados. El más ambicioso parece ser aquel que sumaría en la cabeza de listas al “renovador Massa (a senador) y a Florencio Randazzo (diputado), aun cuando esperan que el juego de la mancha venenosa no toque a esos candidatos que, como se sabe, compartieron gabinete con las estrellas "judiciales" K y los bolsos de José López.