Huracán ganó la Copa y su sueño no se pinchó
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En un partido que se jugó más con el corazón que con los pies, Huracán terminó marcando el desnivel en los penales y, luego de empatar 0-0, derrotó a Rosario Central, por 5-4, en la final de la Copa Argentina disputada en el Estadio Bicentenario de San Juan.
Durante el tiempo reglamentario, el partido fue deslucido y ofreció poco y nada. Apostando al contragolpe, Huracán intentó dañar a su rival por los costados, mientras que Central no pudo prevalecer sus intenciones en ataque.
El atacante Ramón Abila, promediando el segundo tiempo, no pudo vencer a Mauricio Caranta, en una de las jugadas más claras de todo el partido.
Con los apuros del caso, Miguel Angel Russo movió el banco y dispuso los ingresos de Sebastián Abreu y del pibe Correa.
Sin embargo, el 0-0 no se rompió y en los penales Huracán encontró su noche de gracia. El Globo se llevó la Copa, clasificó a la Libertadores y se llevó un importante premio económico (5 millones de pesos).