Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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Fin a un mito: la exportación de carne vacuna no compite con el mercado interno

Informe especial de Revista Carne Argentina, del IPCVA. China consume el garrón y la UE los bifes, pero acá sigue firme el asado.
Actividad frigorífica en la Argentina. / Foto: NA.

Guillermo D. Rueda

grueda@lanueva.com

   “Europa se lleva los cortes de alta calidad; Israel y Chile el cuarto delantero; China el garrón y el brazuelo; Rusia el trimming y Brasil la picaña”.

   Lo aseguró Ulises Forte, presidente del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA).

   “Es decir que los cortes del parrillero, que son los que más nos gustan a los argentinos, prácticamente no se exportan”, agregó.

   “De esta manera, si seguimos creciendo en exportaciones (hoy se ubican en el 10% del total producido) quiere decir que van a quedar más asados, vacíos, matambres y carnaza para milanesa en el mercado interno, a precios accesibles”, aseveró el dirigente pampeano.

   En otras palabras, la Argentina podría recuperar las exportaciones no sólo sin afectar el mercado interno sino, además, aumentando la oferta interna de los cortes más consumidos.

Ulises Forte, presidente del IPCVA. / Foto: Facundo Morales-La Nueva.

   Estas son conclusiones que surgen tras la publicación —en la víspera— del informe de Revista Carne Argentina, que elabora el equipo de Comunicación y Prensa del IPCVA a cargo del licenciado Luis Fontoira, respecto de los cortes elegidos por la mayoría de los compradores mundiales de carne vacuna argentina, en el período iniciado en mayo de 2016 y que se prolongó hasta junio del corriente año.

   Definitivamente, las ventas del último año dan por tierra con el supuesto de que la exportación compite con el mercado interno.

   De acuerdo con el análisis, los principales ocho destinos para la carne vacuna argentina, tomando las ventas en el segmento citado, fueron China; Unión Europea (ingresando por los puertos de Países Bajos y Alemania); Chile, Israel, Rusia, Brasil y Marruecos, toda una rareza en el mapa de las exportaciones.

   Considerando que todos compran cortes y productos distintos, de categorías vacunas disímiles y para usos diferenciados, en el trabajo se concluye en algo que siempre afirman los exportadores argentinos: “Es una ventaja vender cortes y no animales enteros”.

Hacia el mercado chino

   Según el trabajo del IPCVA, China fue el principal destino en volumen para la carne vacuna argentina en el último año, aunque se trata de compras muy distintas a las de Europa occidental. Son para los cortes estrella del mercado: el garrón y el brazuelo, denominados Shin y Shank, mayormente de vaca.

   Toda la carne vacuna que se exporta hacia China es congelada y sin hueso. Esto sucederá hasta que se obtenga la ampliación del protocolo sanitario, un aspecto en el que se está trabajando con el objetivo de conseguir la habilitación para carne enfriada, con hueso y termoprocesada, tal como sucede con un país vecino: Uruguay.

   Entre junio de 2016 y mayo de 2017, la Argentina exportó hacia China 64.676.901 kilogramos de carne vacuna, por un valor total de 266.204.606 dólares.

En la Unión Europea

   La mayoría de las exportaciones ingresan a través de los puertos de Países Bajos (donde se registró un alza del consumo de los bifes a partir del fenómeno Máxima, según aseguran los industriales) y los de Alemania, el lugar europeo más fanático de la carne nacional.

   Según se detalla en el informe, hacia esos puertos se despachan cortes de alto valor —refrigerados—, mayormente de novillos de primera calidad. Desde ese lugar, los distribuidores europeos distribuyen el bife argentino por el Viejo Continente.

   Además, nuestro país posee dos cuotas especiales para el ingreso de carne de alto valor con aranceles diferenciados. La Hilton, para carne a pasto (29.500 mil toneladas anuales, con arancel del 20%, otorgadas a la Argentina), y la 481 (48.200 toneladas en total, para todos los países proveedores, con arancel 0), destinada a carne terminada a corral.

   La ampliación de la Cuota Hilton, obtenida hace algunos años, y el ingreso a la Cuota 481, se debieron a los trabajos de estudios jurídicos que financió el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA).

   Aunque actualmente la UE fue desplazada por China en cuanto al volumen de demanda de carne argentina, los mejores precios para nuestros bifes se siguen registrando en el antiguo continente.

   Los cortes más demandados en el último año fueron los bifes, el corazón de cuadril y el lomo.

   Entre los meses de junio de 2016 y de mayo de 2017, la Argentina exportó hacia Países Bajos por un valor total de 102.351.469 dólares y hacia Alemania por 249.995.184 dólares.

Kosher de Las Pampas

   El mayor volumen exportado hacia Israel es de carne vacuna congelada sin hueso del cuarto delantero del vacuno, como aguja, cogote o marucha.

   La carne exportada hacia ese destino posee certificación kosher. La tipificación de los alimentos kosher Kashrut, cuya raíz es Kaf-Shun Resh, significa propio, permitido o correcto.

   Para que un producto Kosher pueda ser comercializado y aceptado como tal debe poseer, en su envoltorio, un sello distintivo proporcionado por una Autoridad Rabínica.

   Entre los meses de junio de 2016 y de mayo de 2017, la Argentina exportó hacia Israel 18.991.949 kilogramos de carne vacuna, por un valor total de 116.560.677 dólares.

¿De qué se trata el trimming?

   “Aunque no es un corte como tal, el trimming es uno de los productos más exportados en volumen, especialmente a destinos como Rusia y China”, se asegura en el informe del IPCVA.

   “Trimming son los recortes de troceo; es decir, los pequeños pedazos de carne y grasa que se descartan para el corte anatómico o lo que se obtiene de pelar huesos”, se agrega.

   Se clasifica de acuerdo a la proporción músculo–grasa, siendo de mayor valor el que tiene un alto contenido de carne y poca grasa.

   De esa forma se obtienen trimming de 95VL, 90VL, 85VL, siendo 90, por ejemplo, la proporción de músculo, quedando en este caso un 10% de grasa. Aunque se exportan pequeñas cantidades de carne enfriada sin hueso de alta calidad (bife ancho, bife angosto, lomo, etc.), lo más vendido hacia Rusia es la falda, congelada y sin hueso, y el trimming.

   Hasta el boom chino de los últimos dos o tres años, la Federación Rusa era el principal destino en volumen para la carne vacuna argentina que era —y es— destinada mayormente a la producción industrial.

   Los analistas prevén que con la recomposición de la economía rusa las exportaciones hacia ese destino vuelvan a aumentar en los próximos años.

   Entre junio de 2016 y mayo de 2017, la Argentina exportó hacia la Federación Rusa 4.892.816 kilogramos de carne vacuna, por un valor total de 16.372.153 dólares.

Brasil, a pura picaña

   La picaña (“picanha”, en portugués) es uno de los cortes preferidos por los consumidores de Brasil y que, con el aporte del turismo, también se puso de moda en los últimos años en algunos restorants de Buenos Aires.

   Se trata, ni más ni menos, que de la tapa del cuadril, que es lo que se exporta mayormente hacia las tierras cariocas. También se envían algunos bifes y colitas de cuadril.

   Entre junio de 2016 y mayo de 2017, se exportaron 1.542.022 kilos de picaña enfriada y 3.488.230 kilos de congelada.

   En el mismo período, la Argentina exportó hacia la Brasil 6.212.742 kilogramos de carne vacuna, por un valor total de 56.716.590 dólares.Por lo general, a los destinos de la Unión Europea se envía carne de novillos JJ y J y, en menor medida, de vacas AA y A, y vaquillonas AA y A.

   A Chile se envía carne de vacas y vaquillonas especiales (AA y A) y a Israel los cuartos delanteros de los novillos que se exportan a la UE.

   A Brasil se exportan mayormente las tapas de cuadril de los animales de buena calidad destinados a Europa.

   A Marruecos se exportó carne de novillitos regulares y, a Rusia, lo más enviado es carne de vaca manufactura.

   A China, el grueso del volumen corresponde a carne de vacas regulares (B-C) y manufactura (D).

   La tipificación vigente proviene de una resolución de la Junta Nacional de Carnes de 1973 que, básicamente, toma las letras de la palabra Junta para calificar de mayor (J) a menor (A) la calidad la categoría novillos.

   En tanto, los novillitos, vacas, vaquillonas, terneros y toros se califican de mayor a menor calidad utilizando las letras A, B, C, D y F.

Marruecos, un caso exótico

   En el informe del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA) se cita el caso de Marruecos como importador como una rareza dentro del mapa.

   Se comenta que no es un mercado habitual para los exportadores, sino que se trata de una licitación anual que realiza el reino para el abastecimiento del personal del ejército de la citada nación.

   En el último año se envió hacia esas tierras africanas cuarto delantero congelado con hueso y cuarto trasero con hueso.

   El total de carne exportada hacia Marruecos entre los meses de junio de 2016 y mayo de 2017 fue de 4.660.432 kilogramos, por un valor total de 14.914.064 dólares.

Huachalomo, posta rosada o lomo vetado

* Fanas: Los chilenos son fanáticos del asado, entendido como sistema de cocción o preparación, aunque al momento de encender el fuego no suelen utilizar la costilla del vacuno, sino otros cortes —sin hueso— que tienen denominaciones muy distintas a las utilizadas en el país, como huachalomo (aguja), posta rosada (bola de lomo) o lomo vetado (bife ancho).

* Capital: Nuestro país es uno de los principales proveedores de carne de ese mercado y es reconocido por la calidad entre los consumidores más sofisticados de los barrios más acomodados de Santiago de Chile.

* Casi U$S 160 M: Entre los meses de junio de 2016 y mayo de 2017, la Argentina exportó —hacia Chile— 28.367.271 kilogramos de carne vacuna, por un valor total de 158.227.771 dólares.