Dos bahienses bailan una bachata en el andén de la Estación Sud
No es obligación bailar. Claro que te va a costar quedarte quieto porque lo que se va a vivir en "El Rumbón, una fiesta para bailar", será super sabroso.
El próximo jueves, a las 22, en el Teatro Rossini se presentarán las orquestas La Descarga (Buenos Aires) y Santa Elvira (Bahía Blanca), además habrá sorteos y la presencia de bailarines profesionales como Jackson Bahía y Mariel Sciancalepore.
Jackson es profesor de salsa y bachata. La movida está creciendo cada vez más y hay varios profesores tanto en nuestra ciudad como en la zona.
Nos contó hace cuánto que no sale a bailar, la movida de ritmos caribeños que hay en Bahía y anticipó su presencia en “El Rumbón, una fiesta para bailar”.
"Está bueno porque la gente cada vez que ingresa a bailar nota la diferencia. Es un ambiente familiar, social e inclusivo. Esta didáctica de aprender a bailar y vincularse con otras personas es muy linda. Se generan grupos muy interesantes", aclaró Jackson.
Eso será el próximo jueves, desde las 22, en el Teatro Rossini. Tocarán las orquestas La Descarga (Buenos Aires) y Santa Elvira (Bahía Blanca). Además, habrá sorteos, promociones en barras y exhibiciones de especialistas.
Está bueno porque la gente cada vez que ingresa a bailar nota la diferencia. Es un ambiente familiar y social, inclusivo. Esta didáctica de aprender a bailar y vincularse con otras personas es muy linda. Se generan grupos muy interesant
Jackson Bahía (Diego Pimentel), salsa y bachata se maneja con esa movida de ritmos caribeños. Son varios profesores, cada vez crece más. La movida es grande, somos muchos los profesores.
Nos contó hace cuánto que no sale a bailar, la movida de ritmos caribeños que hay en Bahía y anticipó su presencia en “El Rumbón, una fiesta para bailar”.
Eso será el próximo jueves, desde las 22, en el Teatro Rossini. Tocarán las orquestas La Descarga (Buenos Aires) y Santa Elvira (Bahía Blanca). Además, habrá sorteos, promociones en barras y exhibiciones de especialistas.
Está bueno porque la gente cada vez que ingresa a bailar nota la diferencia. Es un ambiente familiar y social, inclusivo. Esta didáctica de aprender a bailar y vincularse con otras personas es muy linda. Se generan grupos muy interesantes.
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